Estaba viendo la nueva versión de “El llanero solitario” con mi sobrino, y comencé a pensar en los héroes. En los héroes que sólo existen en la ficción: en las historietas, en los libros, todos creados hace ya mucho tiempo.Pensé en la violencia descarnada que domina nuestra sociedad, y en lo útil que sería un héroe. Alguien que salvara a las víctimas. Alguien bueno. Alguien que luchara por las causas que creemos (por convicción propia o ajena) que están perdidas. Desinteresado. De corazón puro. A decir verdad, una mezcla entre He-Man y el Chapulín Colorado era lo que me estaba imaginando.En estos días, la humanidad está de duelo. La muerte de Nelson Mandela pone...
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